La Fundación Juegaterapia, en colaboración con Rocalba, ha desarrollado una nueva iniciativa para mejorar el día a día de los niños que se encuentran hospitalizados en tratamiento oncológico. Bajo el nombre de “Mágicas Semillas Solidarias” han lanzado una colección de sobres de semillas que ayudará construir jardines dentro de los hospitales para que todos los niños ingresados puedan jugar al aire libre.
Mágicas Semillas Solidarias
La colección de semillas se compone de un sobre de semillas de lavanda (aromática) y otro de pensamiento (planta de flor) que se comercializarán a través de la web de Juegaterapia y en los puntos de venta donde se distribuyen los productos de Rocalba. Su precio es de 3,95€ y los beneficios de su venta estarán destinados a la construcción de jardines en los hospitales.
La Fundación Juegaterapia ha presentado las semillas solidarias a través de un spot publicitario realizado por Raúl Barbolla y doblado por Sofía, una niña que conocieron cuando estaba recibiendo tratamiento oncológico en el hospital y ahora, ya recuperada, colabora y participa en todas las actividades que realiza la Fundación. Además, cuentan con la colaboración solidaria del estudio de sonido The Lobby.
El Jardín de mi Hospi
El proyecto “El Jardín de mi Hospi” nació en el año 2013 cuando desde la Fundación Juegaterapia se detectó la necesidad de un espacio al aire libre para que los niños y sus familias pudieran salir de las habitaciones en un espacio seguro para su salud. La Fundación tiene como objetivo que el tratamiento médico interfiera lo menos posible en el desarrollo de los niños y mediante este proyecto trata de generar un impacto positivo en su salud física y mental, mediante la terapia del juego.
Con este propósito, ya han construido cinco espacios lúdicos en los hospitales de La Paz, 12 de Octubre, Gregorio Marañón y Niño Jesús en Madrid y otro en La Fe de Valencia. El siguiente hospital donde empezarán pronto las obras es el Hospital Materno Infantil de Málaga.
Sobre Juegaterapia
La Fundación Juegaterapia ayuda a los niños enfermos de cáncer a través del juego. Recoge videoconsolas y tablets que la gente ya no usa y las reparte por las habitaciones de oncología pediátrica de todos los hospitales españoles para que los pequeños pasen sus ciclos de quimio jugando y se olviden de su enfermedad. En España ya ha entregado videoconsolas y tablets en 76 hospitales y también fuera en centros hospitalarios de Portugal, Marruecos, Colombia, El Salvador, Afganistán, India, Guinea y Guatemala.