Un jardín repleto de polinizadores como abejas, mariposas o pájaros no solo es un espectáculo para la vista, sino un pilar fundamental para la biodiversidad y la supervivencia de nuestras plantas.
Crear un hábitat en nuestro propio jardín que les acoja no solo beneficia la biodiversidad global, sino que también enriquece nuestro entorno inmediato. Aquí te mostramos cómo puedes transformar tu espacio verde en un paraíso para estos trabajadores de la naturaleza.
La importancia de los Insectos Polinizadores
Los insectos polinizadores desempeñan un papel crucial en la polinización de muchas flores y plantas para el cultivo frutas y verduras. Al visitar las plantas en busca de alimento (néctar), estos insectos transportan el polen de una flor a otra, facilitando la reproducción y fecundación de las plantas.
Este proceso es esencial para la salud de los ecosistemas naturales, puesto que nos ayuda a mantener la diversidad genética de las plantas y la productividad de los hábitats. Sin embargo, con la pérdida de hábitats naturales, la contaminación y el uso de pesticidas, las poblaciones de polinizadores están en declive, un problema que podemos ayudar a mitigar desde nuestros propios jardines.
Cómo crear un Hábitat en tu Jardín
Crear un refugio para polinizadores en el jardín es más fácil de lo que piensas. El primer paso es seleccionar plantas que sean atractivas para estos insectos, preferiblemente aquellas que proporcionen néctar y polen durante diferentes temporadas del año para asegurar una fuente continua de alimento.
Podemos añadir hoteles de insectos, bastará con incluir en nuestro jardín un espacio en el que los insectos beneficiosos encuentren refugio durante los meses más fríos o días calurosos. Los hoteles de insectos están destinados a atraer y dar refugio a una variedad de insectos beneficiosos, como abejas solitarias, mariquitas, avispas parásitas, escarabajos, mariposas y otros polinizadores. Estas estructuras suelen estar hechas de materiales naturales apilados, como madera, bambú, ramitas, paja, hojas secas, y otros materiales similares, proporcionando así una serie de cavidades y espacios donde los insectos pueden anidar, descansar y reproducirse.
Crear un hábitat acogedor en tu jardín para atraer aves puede ser una experiencia gratificante y beneficiosa para el medio ambiente. Instala alimentadores de semillas para aves silvestres, como los comederos de plataforma o los tubulares, y mantenlos abastecidos con una variedad de semillas y proporciona una fuente de agua limpia para que las aves se bañen y beban.
Es esencial evitar el uso de pesticidas químicos, optando en su lugar por métodos de control de plagas orgánicos y naturales que no dañen a los polinizadores.
Variedades de plantas para atraer Polinizadores
Existen muchas plantas y flores que son perfectas para atraer a polinizadores.
- Flores nativas: escoge variedades plantas autóctonas, están bien adaptadas al clima y suelo de la zona en la que vives y podrás atraer a los polinizadores nativos de la zona. Muchas plantas aromáticas producen floraciones ricas en néctar que atraen a muchos polinizadores, como la lavanda, el romero o el tomillo. Otras especies de grandes flores como los cardos o bulbos como los alliums atraen a muchas mariposas de forma natural.
- Plantas anuales y perennes: Son muchas las plantas que producen flores que atraen a los insectos; echinaceas, verbena, aster, zinnias, cosmos y caléndulas, atraen una amplia variedad de polinizadores además de llenar de vida y color tu jardín
- Arbustos y árboles: los arbustos y árboles frutales les proporcionan refugio y cuando florecen aportan un delicioso néctar, arbustos como la Buddleja, conocida como el “Arbusto de las mariposas” atraen a tu jardín cantidad de estos insectos y como no, arbustos que produzcan bayas, como el espino de fuego, que da deliciosas frutas para las aves que también fomentan la biodiversidad y control de plagas en nuestro jardín.
En Rocalba hemos querido poner a tu disposición una serie de mezclas de semillas atrayentes para que puedas cultivar flores y crear un ecosistema favorable a los insectos polinizadores. Encontrarás:
Al establecer un jardín que promueva la salud de los polinizadores, no solo estás contribuyendo a la conservación ambiental, sino que también te beneficias de un jardín más saludable y productivo.
Un jardín lleno de abejas y mariposas revoloteando es un signo de un ecosistema en equilibrio, donde la naturaleza y los humanos coexisten en armonía. Así que, ponte tus guantes de jardinería, elige tus semillas y empieza a crear tu propio paraíso polinizador. Tu jardín, y el planeta, te lo agradecerán.
