El otoño es una época mágica para el huerto. Con los días más frescos y las primeras lluvias, la naturaleza se prepara para una nueva fase de crecimiento. Aunque muchos asocian esta estación con el final del ciclo de cultivo, lo cierto es que octubre y noviembre son meses ideales para sembrar y cosechar una amplia variedad de hortalizas que prosperan en climas frescos. Si eres de los que piensa que el huerto se detiene en otoño, ¡te sorprenderás con todas las opciones que tienes disponibles!
Desde hojas verdes ricas en nutrientes hasta tubérculos crujientes y plantas aromáticas, el huerto otoñal no solo ofrece una cosecha abundante, sino también sabores intensos y únicos que enriquecerán tu cocina durante los meses fríos. En esta entrada, te invitamos a descubrir algunas de las mejores hortalizas para cultivar en esta temporada, aprender consejos prácticos de cultivo y explorar variedades que quizás no conocías.
¿Estás listo para aprovechar al máximo tu huerto en octubre y noviembre? Sigue leyendo y descubre cómo estas hortalizas pueden llenar tu mesa de color y sabor, mientras disfrutas de la satisfacción de cosechar tus propios alimentos.
1. Habas: un clásico del huerto otoñal
Las habas son una de las hortalizas más resistentes al frío y una opción perfecta para plantar en otoño. Lo que quizás no sepas es que las habas también pueden mejorar el suelo de tu huerto, ya que fijan nitrógeno en el terreno, enriqueciendo la tierra para futuros cultivos.
- Beneficios para el suelo: las habas son leguminosas, lo que significa que su sistema radicular ayuda a fijar nitrógeno en el suelo, mejorando la fertilidad. Esto es perfecto para preparar el huerto para la primavera.
- Siembra: siembra las habas directamente en el terreno a unos 5-7 cm de profundidad y con una distancia de 20-30 cm entre plantas. No requieren de semilleros, ya que toleran muy bien el frío.
- Consejo Rocalba: a medida que las habas crecen, proporciona soporte a las plantas con tutores para que soporten su peso y los vientos de otoño.
- Curiosidad: las flores de las habas son comestibles y pueden añadirse a ensaladas o usarse como decoración culinaria.
2. Guisantes: dulzura y versatilidad en el huerto
Los guisantes son un cultivo otoñal ideal, tanto por su rápida germinación como por su capacidad para enriquecer el suelo con nitrógeno, al igual que las habas. Son especialmente fáciles de cultivar, lo que los convierte en una excelente opción para huertos de cualquier tamaño.
- Siembra: puedes sembrar los guisantes directamente en el suelo en hileras, asegurando una separación de unos 5 cm entre semillas y 20 cm entre hileras. Para un mejor rendimiento, coloca tutores o redes para que las plantas se trepen.
- Consejo Rocalba: añadir un mantillo de paja alrededor de los guisantes puede ayudar a retener la humedad y prevenir la aparición de malas hierbas. Además, protege las raíces del frío extremo.
- Cosecha: empieza a cosechar los guisantes cuando las vainas estén bien llenas, pero antes de que las semillas se endurezcan. Los guisantes jóvenes tienen un sabor más dulce.
- Curiosidad: los guisantes también son un excelente cultivo para huertos verticales, ya que ahorran espacio y permiten una mayor producción en áreas reducidas.
3. Zanahorias: dulces raíces para el clima frío
Aunque las zanahorias son conocidas, pocos saben que las temperaturas frías intensifican su dulzor. Esto se debe a que, al enfriarse el suelo, la planta convierte sus almidones en azúcares, lo que da lugar a zanahorias más dulces y sabrosas.
- Preparación del suelo: el éxito de las zanahorias depende de un suelo bien trabajado. Asegúrate de que el terreno esté suelto y libre de piedras o terrones, ya que las raíces largas necesitan espacio para crecer sin obstáculos.
- Siembra: siembra las semillas directamente en hileras y cubre con una fina capa de tierra. Las zanahorias prefieren suelos arenosos y bien drenados.
- Consejo Rocalba: cubre los cultivos de zanahoria para protegerlos de las primeras heladas y prolongar su período de crecimiento.
- Curiosidad: las zanahorias moradas y blancas, variedades antiguas de esta hortaliza, también están disponibles y son perfectas para añadir un toque especial y exótico a tu huerto.
4. Puerros: cultivo resistente para todo el invierno
El puerro es una hortaliza que no solo resiste las temperaturas frías, sino que también las prefiere. A lo largo del invierno, puedes disfrutar de su sabor suave y ligeramente dulce, perfecto para sopas y guisos.
- Siembra y trasplante: siembra en semilleros al inicio del otoño y trasplanta cuando los puerros midan unos 15 cm. Coloca las plántulas en surcos profundos para favorecer la producción de tallos blancos largos y tiernos.
- Riego: requieren un riego constante, pero es importante evitar encharcamientos que puedan afectar el desarrollo de los bulbos.
- Consejo Rocalba: a medida que los puerros crecen, apila tierra alrededor de sus tallos para blanquearlos y mejorar su textura.
- Curiosidad: el puerro es uno de los pocos cultivos que puede cosecharse a lo largo de todo el invierno, e incluso mejoran su sabor con las heladas.
5. Borraja: la hortaliza multifuncional
La borraja es una planta que no solo aporta belleza al huerto con sus flores de un azul intenso, sino que también tiene usos culinarios y medicinales. Es ideal para el otoño, ya que es resistente y fácil de cultivar.
- Siembra: se siembra directamente en el suelo, en hileras, a una profundidad de unos 2 cm. Necesita suelos bien drenados y algo de sombra parcial.
- Usos: sus hojas jóvenes pueden cocinarse como espinacas, mientras que las flores son comestibles y decorativas, perfectas para ensaladas o cócteles.
- Consejo Rocalba: La borraja es excelente para atraer polinizadores como las abejas, lo que beneficia a otras plantas en el huerto.
- Curiosidad: la borraja tiene propiedades medicinales antiinflamatorias y se ha utilizado tradicionalmente para tratar resfriados y fiebre.
6. Hinojo: aroma y sabor en tu huerto
El hinojo es una hortaliza versátil, apreciada por su bulbo de sabor anisado y sus hojas aromáticas. Es ideal para climas frescos, lo que la convierte en una excelente opción para el otoño.
- Siembra: puedes sembrar hinojo directamente o en semillero. Necesita suelos bien drenados y bastante luz solar.
- Cosecha: cuando el bulbo esté bien formado, puedes cosecharlo cortando a ras del suelo. Las hojas también pueden cosecharse a lo largo de toda la temporada.
- Consejo Rocalba: evita sembrar hinojo cerca de otros cultivos como los guisantes o habas, ya que puede inhibir su crecimiento.
- Curiosidad: el hinojo es conocido por sus propiedades digestivas y es un excelente complemento para platos de pescado.
El otoño ofrece una oportunidad única para disfrutar de un huerto lleno de vida y productividad. Con hortalizas resistentes como las habas, los guisantes y los puerros, y con opciones más exóticas como el hinojo o la borraja, tu huerto puede mantenerse vibrante y saludable durante toda la estación.
En Rocalba, te ofrecemos todas las semillas que necesitas para empezar tu aventura otoñal en el huerto. ¡Manos al huerto!