Versátiles debido a sus propiedades medicinales, culinarias e incluso cosméticas, las plantas aromáticas son hoy en día muy populares en los hogares, pues pueden situarse tanto en parcelas como en terrazas, jardines, terrazas, balcones e incluso en el alféizar de las ventanas.
Pero hoy, en el blog de Rocalba, nos adentramos en el mundo de las aromáticas desde su perspectiva más decorativa, y es que algunas de estas plantas, además de encajar a la perfección en la huerta, también son idóneas para jardinería. Las aromáticas, de alta rusticidad, fácil cuidado y bajo mantenimiento, tienen un gran interés ornamental debido a la floración que poseen y por el porte que tienen cuando crecen, siendo adecuadas, según los casos, para formar arriates, macizos arbustivos o borduras en nuestros jardines.
Nuestra selección de plantas aromáticas decorativas
Hemos escogido algunas plantas aromáticas que, además de contar con múltiples usos y propiedades, son perfectas para decorar el jardín. Además, su rusticidad las convierte en plantas de sencillos cuidados con baja exigencia hídrica, por lo que además de decorar la terraza o al jardín, podremos aprovechar todas sus propiedades.
Lavanda (Lavandula angustifolia)
La lavanda es una planta arbustiva semileñosa que puede alcanzar los 90 cm de altura. Su peculiar floración puntiaguda de colores azules y violáceos se alza sobre pedúnculos, asomando por encima de los arriates, se produce desde junio hasta agosto. Su interés ornamental radica en la capacidad de formar impresionantes macizos arbustivos, que se solapan entre sí, acompañados en la parte superior por el enjambre de flores azules que forman las lavandas.
Sitúalas a pleno sol, pues su resistencia las hace tolerantes al frío y, además, no necesitarás regarlas en abundancia.
Malvavisco (Althaea officinalis)
El malvavisco es una bonita planta herbácea y erecta que no debe faltar en un jardín. Puede alcanzar el metro y medio de altura, con lo que se puede emplear para delimitar un parterre o generar una pantalla vegetal en un muro. Posee suaves hojas peludas desde donde surgen flores de hasta 2 cm de diámetro, con un llamativo color rosa pálido – lila ideal para decorar el jardín. Podrás disfrutar su floración desde mediados de verano hasta el otoño, una prolongada floración de gran interés ornamental.
El malvavisco se siente cómodo en semisombra, y sus necesidades de riego son generalmente bajas, aunque tendremos que incrementar la frecuencia de riego durante los meses más calurosos.
Manzanilla (Chamaemelum nobile)
La manzanilla es una planta medicinal muy popular y habitual en jardines y balcones, con una floración de color blanco que se extiende desde la primavera hasta finales de verano. Puede formar macizos que alcanzan alturas de 60 cm, quedando por debajo de la lavanda y el malvavisco, con lo que es adecuada para formar arriates delante de las agrupaciones de lavanda, combinando así la floración blanca con las azuladas de la lavanda y el malvavisco.
Esta planta es muy rústica, por lo que puedes elegir situarla a pleno sol o en semi sombra. Además, sus necesidades de riego son bajas, por lo que se trata de una planta muy sencilla de cuidar.
Romero (Salvia rosmarinus)
El romero es un arbusto leñoso muy empleado en jardinería en sus diferentes variedades, produce flores de color blanco y azules y puede alcanzar los 80 cm de altura. Se puede emplear para acompañar los macizos de la manzanilla. Su floración se alarga desde marzo hasta octubre, con lo que se irá combinando con la floración de las especies anteriormente mencionadas.
Además, es una planta a la que se le pueden efectuar recortes a modo de topiaria, para ir regenerando los brotes jóvenes, lo que le otorga un interés ornamental más allá de su floración. Al romero le encanta permanecer a pleno sol, y su fortaleza le otorga una gran resistencia al frío, además de bajas necesidades hídricas.
Salvia (Salvia)
La salvia es una planta muy versátil en jardinería, empleada tanto para formar arriates, como para delimitar los distintos espacios del jardín. Puede alcanzar los 70 cm de altura y posee una bellísima floración de color azul intenso y toques violáceos dispuesta en espigas terminales que puedes disfrutar desde la primavera hasta el verano.
En el jardín, puedes formar parterres continuos con salvia que para generar una alfombra que resalte por encima del resto de macizos. Las salvias requieren de suelos ligeros y pueden vivir a pleno sol. Al igual que las aromáticas mencionadas, no tiene grandes necesidades de riego.
Cebollino (Allium schoenoprasum)
Para finalizar, no podemos dejar de recomendar el cebollino, una planta perenne, de pequeño tamaño, que alcanza los 40 cm de altura y cuenta con una floración rosada en forma de bola que se produce al final de los tallos durante la primavera.
La hemos seleccionado por su porte ligero, diferente al resto de plantas que os hemos presentado. Con cebollino puedes formar plantíos en los bordes de los parterres, junto a los caminos o zonas de paso, para realzar el resto de formaciones arbustivas del jardín. Esta planta cuenta con una necesidad de riego moderada, y es preferible situarla en semi sombra.
¿Te gustaría decorar el jardín con plantas aromáticas? Aprovecha su rusticidad y su sencillez para disfrutar de hermosas flores sin complicaciones.
¡Y no dejes de contarnos cuáles emplearías en tu jardín, terraza o balcón!