Es el momento perfecto para plantearte la siembra de césped en tu jardín. Si aprovechas esta época para la siembra, podrás pasar un verano de lo más agradable tumbad@ sobre el césped.
Sin embargo, a la hora de plantearnos la instalación de césped en nuestro jardín, generalmente surgen algunas dudas, especialmente en ese momento en el que vemos el gran abanico de posibilidades que nos ofrece el centro de jardinería.
Las mezclas de césped que puedes encontrar en tu centro de jardinería son de lo más diversas, y dependiendo de las especies que componen las mezclas, estas están más indicadas para un tipo de jardín que otro.
De hecho, los expertos en césped tienden a evaluar múltiples factores, analizando el suelo del jardín, para determinar qué césped lo cubrirá mejor en base a su composición, seleccionando las mezclas que mejor pueden cubrir los distintos suelos del jardín.
Antes de preguntarle al dependiente para que te aconseje sobre el césped más adecuado para tu jardín, contar con una pequeña base de conocimiento no está de más. Y eso es precisamente lo que queremos contarte desde Rocalba en el artículo de hoy, para que puedas responder a la pregunta: ¿Cuál es el mejor césped para mi jardín?
Los tipos de césped según el clima
A la hora de escoger la mejor especie de césped para nuestro jardín, un aspecto fundamental es el clima. ¿Vivo en un entorno frío o caluroso? ¿Llueve a menudo? ¿Qué temperatura media tiene mi jardín? ¿Contará mi césped con sol directo, o tendrá más espacios de sombra?
Especies de césped para climas cálidos
Existen miles de especies cespitosas, pero solamente algunas presentan una buena respuesta ante sequías y altas temperaturas:
Sin duda, el césped más empleado para los climas cálidos es el conocido como bermuda, gramilla o grama fina (Cynodon dactylon), un césped calificado como de fácil mantenimiento, por ser resistente, además de a climas cálidos, a suelos de salinidad elevada y a aguas de riego de baja calidad.
Este es un césped de rápido crecimiento con muy buena resistencia a las pisadas, de ahí que se emplee a menudo en jardines públicos, campos de golf y campos deportivos.
Otro de los céspedes más seleccionados para los climas cálidos, también resistente a suelos salinos, al calor y a la sequía, es el conocido como Kikuyu (Pennisetum clandestinum), de origen tropical. Un césped muy denso, de hoja ancha, que resiste las pisadas de forma excepcional.
Por último, un césped para climas cálidos muy acostumbrado a la sombra y semisombra, el Bahía Grass (Paspalum Notatum). Se trata de otra especie tropical o subtropical, más oscura, de crecimiento algo más lento que el resto (aunque una vez implantado ya no hay quien lo pare), y poco recomendable para mezclar con otras semillas de césped.
Especies de césped para climas fríos
En climas fríos, optamos por céspedes completamente distintos, resistentes a las bajas temperaturas, a altos niveles de humedad y con gran capacidad de adaptación.
De entre los tipos de césped para climas fríos, el Ray Grass inglés (Lolium perenne) es la referencia indiscutible. Debido a su rápido crecimiento, sus niveles de densidad, su resistencia al frío y su llamativo color verde brillante, es de los céspedes más instalados en este tipo de climas. Es además un césped muy utilizado en las mezclas, por los resultados que ofrece y la buena combinación con otras especies.
Muy próximas al Ray Grass, encontramos a las distintas variedades de Festuca, pero nos centraremos una de las más populares, la Festuca arundinacea, un césped de bajo mantenimiento y extraordinariamente resistente a las inclemencias meteorológicas. De hecho, muchos lo catalogan como “todoterreno” debido a que no necesita el mejor suelo para adaptarse, aunque necesita más meses para arraigar si lo comparamos con el Ray Grass.
También cabe mencionar la Festuca rubra rubra, idónea para climas templados. La Festuca tricophylla y la Festuca rubra rubra son más invasoras, pero algo menos estéticas que la Festuca rubra commutata, también muy encespedante y más resistente que sus hermanas.
Las Festucas son céspedes muy elegantes, de hoja fina, por lo que son generalmente menos todoterreno que otras especies. Es habitual mezclarlas con el Ray Grass inglés y con la Poa pratensis, pues la mezcla se comporta bien en condiciones de sombra, frío y humedad, aumentando la cobertura.
Queremos reseñar también el Agrostis stolonifera, perfecto para climas húmedos y para espacios de sombra. La razón por la que lo ponemos en tercer lugar es porque, aunque una vez implantado el resultado es excelente, tiene menor facilidad de implantación que sus compañeros anteriores, especialmente al compararlo con el Ray Grass inglés, y por ser más exigente en lo que respecta al mantenimiento.
Por último, pero no menos importante, debemos mencionar la Poa pratensis (Poa pratense), conocida como pasto azul de Kentucky (Kentucky Bluegrass), una especie muy utilizada y caracterizada por su buen arraigo y su resistencia al desgarro, por contar con un fuerte sistema radicular y muy empleada en las mezclas cespitosas.
Otros aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir un tipo de césped
El clima es un aspecto importante, pero también lo son otros aspectos que debemos de tener en cuenta para elegir la mejor especie de césped para nuestro jardín. Todo se resume en una pregunta: ¿Qué uso le vas a dar a tu césped?
Tal vez solamente desees contar con un pequeño espacio de césped puramente decorativo u ornamental, un césped de los de “se mira pero no se toca”.
O quizá desees disfrutar jugando con amigos, con la pelota, con mascotas, con pistolas de agua, disfrutando con tus hijos, sobrinos, etc.
Puede que, sin embargo, tu prioridad sea que tu césped se mantenga verde la mayor parte del año, o tal vez cuentas con una piscina en el espacio en el que deseas instalar el césped.
La calidad del suelo es otro aspecto fundamental a la hora de escoger una especie u otra.
Teniendo en cuenta todos estos aspectos, podrás acercarte a tu centro de jardinería de confianza para preguntar por el césped que mejor responda a tus necesidades.
Debes de saber que generalmente no se siembran variedades puras en solitario, pues un mismo terreno suele contar con características de múltiples suelos, de forma que a través de una buena mezcla se consigue cubrir todo el terreno.
De hecho, lo normal es sembrar mezclas de especies para funciones concretas: resiembra, todoterreno, estético, recreativo, sombra, e incluso mezclas de lo más originales, como nuestra fórmula ikebana, fórmulas decorativas con tréboles e incluso una mezcla con flores variadas ¡Para darle colorido al jardín! Las posibilidades son infinitas.
Pero date prisa ¡Estamos en temporada de siembra!